Una de las metas más importantes en cualquier familia debe ser la armonía entre los hermanos. Pero si educas en casa, esto se vuelve parte de tu ambiente escencial para poder tener una educación efectiva.
Aunque todos los padres estan por supuesto interesados en la buena relacion de los hijos, los educadores en casa lo están el doble. No es lo mismo tener a los hijos solo un rato en la mañana y otro en la tarde, con lapsos de tiempo cortos de convivencia, que pasar todo el día juntos, teniendo que convivir en los detalles más pequeños y además querer que haya unas rutinas básicas y un aprendizaje valioso desde el hogar. ¡Y de eso se trata! de aprender a convivir, de ser la primera expresión de una sociedad libre, respetuosa, que ama y se cuida entre los individuos. Educar en casa es la oportunidad para que cada uno esté dispuesto a dar lo mejor de sí; a cambiar, a perdonar, a pedir perdón, a ceder los derechos, a morir al «yo merezco». Y esto comienza por los padres. Si papá y mamá están dispuestos a ser moldeados, los hijos seguirán el ejemplo más facilmente.
Es triste y vergonzoso cuando entre hermanos notamos un trato brusco, desatento, grosero. Y afuera con los amigos sí hay armonía. Si esto pasa necesitamos preguntarnos por qué en casa se comportan asi? Qué pasa? hay celos?, ¿hay sentimientos de inferioridad o rechazo de parte de los padres?, ¿hay orgullo en algun hijo que se cree más que los hermanos?, ¿y todo esto de dónde sale, por qué pasa?
Lo primero que debemos recordar es que la naturaleza humana tiende siempre al egoísmo y el orgullo. El corazón de los niños, también es humano, y por mas tiernos y lindos que los vemos, son humanos, pecadores. No te escandalices! el pecado no es solamente matar o robar. También es tener celos, engañar, mentir, manipular, dejarse llevar por la ira… aunque sea con voces tiernas y en cuerpos chiquitos.
Acá te dejo unos principios y prácticas que puedes reforzar con tus hijos desde pequeños (ya sabes que según la edad de desarrollo puedes enfocarlo de distintas maneras): Nota. Nada de lo que puedas leer o aplicar por consejo de otros va a reemplazar la herramienta mas poderosa que tenemos: LA ORACIÓN.
SITUACION | PRINCIPIO | CUALIDAD DE CARÁCTER A TRABAJAR | QUÉ HACER (PRÁCTICA) |
Un hermano menosprecia al de otro por sus carácteristicas físicas. (eres feo, obesa, cerdo, horrible, chaparra, flacuchenta…) | Todos fuimos creados a imagen y semejanza de Dios por lo que tenemos la misma dignidad y valor. Genesis 1:28 | Bondad, amabilidad, caridad y ternura | Conversar sobre las diferencias fisicas entre mamá y papá y que juntos formaron a cada uno de sus hijos. Rechazar a alguno por el fisico, es menospreciar el aporte genético que por soberanía de Dios los padres hicieron. Mirense juntos como familia al espejo y vean las similitudes y diferencias que encuentran entre ustedes. Oren dando gracias a Dios por hacerlos distintos pero parte de una misma familia. Haga que sus hijos se digan entre ellos palabras amables durante toda una temporada hasta que se convierta un hábito. No permita descortesías entre ellos aunque parezcan pequeñas. Corrijalas inmediatamente. |
Quieren recibir pero no dar. No prestar, no compartir. Ganar el primer lugar siempre por encima de sus hermanos. | La familia es el lugar donde se practica la generosidad, el servicio y la misericordia. | Generosidad | Sirva 1 solo pan en la mesa para todos los miembros de la familia. Diga «si todos en casa tenemos hambre, pero solo tenemos 1 pan, qué hacemos? deje que los hijos respondan guiados por su conciencia. Razonen sobre el compartir lo que tenemos como medio de bendecir a otros, aunque implique que yo me quede con «menos». Compartan ese pedazo de pan y oren dando gracias por todo lo que tienen para compartir. Pida a los hijos que traigan algo que quieren compartir con sus hermanos. (algun juguete, prenda de vestir o comida especial). |
Habrá bendición únicamente mientras haya armonía. Ver los frutos cuando los hermanos se quieren, se cuidan y se acompañan es maravilloso.😍🥰
Enseñemos con el ejemplo, dediquemos tiempo para ir al corazon de las situaciones en el hogar y trabajemos en ellas intencionalmente. Todo lo que sembremos ahora, dará fruto mas adelante.
Natalia Díaz